¿Les costará caro a los gruperos el exceso de redes sociales?
Con la cancelación de todos los eventos masivos, los gruperos han optado por invadir las redes sociales, arriesgando demasiada exposición a sus marcas.
Como es de esperarse con la cancelación de todos los eventos masivos, conciertos y festivales que congregan a multitudes en general, los diferentes medios de comunicación que nos dedicamos a cubrir este tipo de contenidos, nos vemos en la necesidad de estar buscando alternativas que de alguna manera suplan cada una de las cosas que cotidianamente realizamos.
Sorpresa para muchos, es darnos cuenta de la variedad de propuestas que ahora han invadido las redes; aunque peligrosamente, también notamos que en esta necesidad de estar vigentes y en contacto con la gente, vemos algunas situaciones que no son precisamente el origen de la fama por la que han sido aceptadas desde un inicio. Al pasar apenas algunas semanas de estar en casa (algunos una y otros dos), el público comienza a buscar cosas que sean una alternativa no improvisada y motivada por la creatividad del momento.
Veo que los conciertos han sido bien aceptados, las bromas, la vida íntima, el día a día en casa, aunque algunas fórmulas que comenzaron con gran expectativa al inicio de esta cuarentena poco a poco han visto disminuida su audiencia por la simple y sencilla razón de que ya comienza a haber una saturación de este tipo de contenidos en las redes. Creo fielmente que debemos ser mesurados y no olvidarnos del perfil que busca nuestro público, difícilmente alguien que nunca se ha preocupado por alimentar contenidos de broma ahora la gente lo aceptará como un “cuenta chistes” o haciendo juegos.
Ahora muchos se están enfrentando a lo que en televisión llamamos “rating”, y en busca de esto hacen cualquier cosa con tal de conseguir que el público los voltee a ver. Muchas fórmulas y propuestas son bienvenidas pero otras podrían ser su “talón de Aquiles” por el rápido acceso que se tiene a estas figuras, que ahora que termine la cuarentena más que desear ir a ver un concierto de estos cantantes, mucho público dirá: “Mejor nos reservamos, siento que ya lo he visto mucho”.
Cuidado y dejen hacer a los medios lo que saben hacer que es hablar de ustedes, porque si ahora han decidido ser ustedes sus propios voceros la factura se les cobrará al regreso a la normalidad que todos esperamos.
Como en todo, prefiero que a quien le quede el saco que se lo ponga, es muy bueno estar en contacto y la tecnología nos ha dado esta herramienta única, pero abusar de ella puede aburrir tarde o temprano.
