Hay días que tenemos muchas conductas de amor propio, otros días no son así, pero seguimos en el aprendizaje. Entérate como saber si te estas amando.
El amor propio es un proceso y nos puede llevar ¡TODA LA VIDA!
Se aprende de a poquito, cada día, con paciencia, sin presiones, cada quién con sus recursos, sus técnicas y sus propios conceptos.
Por Montserrat Rivera Sena
Por todos lados nos insisten con que debemos amarnos mucho. Yo misma me lo digo siempre y se lo recuerdo a quienes se dejan. La verdad es que no es nada fácil.
Nadie nos enseña a amarnos desde la infancia; todo lo contrario, nos adoctrinan para complacer a otras personas, a hacer lo que no nos gusta, a pertenecer a un grupo o a una sociedad completa. Dicen que nos enseñan a “hacer lo correcto”.
Pareciera que las personas adultas obligan a las infancias y adolescencias a convertirse en algo que no son, haciendo que al pasar a la edad adulta “nos odiemos” lo suficiente para tener vidas que nos llevan a la infelicidad. Y no, no lo hacen con malas intenciones, fue lo mismo que aprendieron para sobrevivir.
Cada historia es diferente. Que nadie te haga sentir mal por permanecer en situaciones en las que pareciera que no te amas, cada quien tiene su proceso.
Hay días que tenemos muchas conductas de amor propio, otros días no son así, pero seguimos en el aprendizaje. Poco a poco podemos construir la historia que si deseamos, a veces nos hace falta sentirnos sostenidas o acompañadas.
Comprendo que es una necesidad que tengo y que si no la cumplo, todo lo demás saldrá mal.
¿Tú te estás amando?
No importa lo que hayamos hecho o permitido en el pasado, no fue nuestra culpa.
No teníamos herramientas para hacerlo diferente. Quizá hoy ya podemos irnos transformando, cuidarnos y amarnos como lo haríamos con nuestro más valioso tesoro.